El imperio que los poderosos aztecas no lograron conquistar

  • Estefanía Méndez
  • viajes de la bbc

Crédito, Brian Cloudy/Alamy Foto de stock

pie de foto,

Las “yácatas” (pirámides) de Tzintzuntzan son circulares y únicas, hechas de piedra volcánica – quizás las reliquias mejor conservadas del pueblo purépecha

“Esta es la herencia de nuestro pueblo”, dijo mi tío mientras admirábamos las pirámides.

No estábamos en Egipto, sino en la ciudad de Tzintzuntzan, estado de Michoacán, en el suroeste de México.

Las pirámides o Yacatsante nosotros eran redondas y únicas, hechas de piedra volcánica, quizás las reliquias mejor conservadas de los purépechas, un grupo indígena precolombino que una vez gobernó aquí pero que la mayoría de la gente no conoce. De hecho, nunca había oído hablar de ellos hasta hace unos meses, cuando descubrí que era descendiente directo de ese pueblo.

Nacido y criado en California, EE. UU., crecí sin conocer esta parte de mi herencia, que se perdió en mi familia con la muerte de mi abuelo en 1978. Mi abuela se quedó con cinco hijos y sin ingresos. Pero, después de muchos ahorros, trajo a mi padre y a sus hermanos de México a los Estados Unidos en 1983.

Eulália Escoto

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