Unos 2.000 migrantes de diversas nacionalidades partieron este domingo (23) desde el estado de Chiapas, en el sur de México, hacia la Ciudad de México para protestar contra el incendio que causó 40 muertos en Ciudad Juárez la noche del 27 de marzo.

“Hoy partimos denunciando simbólicamente un crimen de Estado. Son 40 migrantes muertos que no han hecho nada”, dijo el activista Irineo Mújica, quien encabezaba la caravana cuando salía de un parque en la ciudad de Tapachula, Chiapas. El grupo está compuesto principalmente por migrantes de Centroamérica, Venezuela, Colombia y Haití.

Según las autoridades mexicanas, el incendio se inició cuando un migrante prendió fuego a un colchón en la celda donde se alojaba con otros 67 hombres, en medio de una protesta contra una posible deportación.

Las imágenes de las cámaras de seguridad mostraron que una vez que estalló el incendio, el personal de seguridad e inmigración no hizo nada para evacuar a los migrantes. Treinta y nueve migrantes murieron instantáneamente, la mayoría por asfixia, y otro en el hospital.

El sábado, las autoridades otorgaron visas humanitarias a migrantes haitianos y africanos, permitiéndoles transitar de manera segura por el país. (AFP)

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