El presidente estadounidense, Joe Biden, y su homólogo chino, Xi Jinping, intentaron sumar aliados a sus respectivas causas en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) el jueves (16). La cumbre tiene lugar en San Francisco, tras la reunión bilateral del miércoles en la que se intentó aliviar las tensiones.

Al inicio de la reunión de líderes de APEC, Biden dijo que la reunión con Xi debería traer beneficios regionales y globales. La pareja se reunió en persona por primera vez en 12 meses el miércoles (15).

“Una relación estable entre las dos economías más grandes del mundo no sólo es buena para estas dos economías, sino para el mundo”, dijo Biden a los líderes de APEC, a pesar de haber llamado inesperadamente “dictador” a su homólogo chino el día anterior.

A pesar de los desacuerdos sobre la soberanía de Taiwán -China considera la isla parte de su territorio- y la condena de Washington a los abusos contra los derechos humanos de Pekín, los dos gobiernos anunciaron el miércoles su compromiso para evitar una ruptura en las relaciones. Xi dijo que China está dispuesta a ser “amigo y socio” de Estados Unidos.

Los dos países acordaron restablecer lazos militares y Xi prometió detener la producción de ingredientes para el fentanilo, un opioide sintético que está provocando una pandemia de adicción en Estados Unidos.

Pese al alivio de las tensiones, Biden afirmó el jueves que Washington es un mejor aliado para las 21 economías que componen el bloque que Pekín, que gana cada vez más terreno.

Biden dijo que Xi preguntó durante la reunión del miércoles por qué Estados Unidos estaba “tan ocupado en el Pacífico”.

“Dije que es porque somos una nación del Pacífico. Gracias a nosotros ha habido paz y seguridad en la región, lo que permite el crecimiento. No estuvo en desacuerdo”, dijo Biden.

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Aprovechando su presencia en el foro, el presidente chino se reunió con su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, con quien acordó llevar las relaciones bilaterales “a un nuevo nivel”, según informó Pekín.

Fue el primer encuentro entre ambos dirigentes, que mantuvieron un diálogo “franco y amistoso”. AMLO invitó a Xi a visitar México.

Y justo en el momento en que la presidenta de Perú, Dina Boluarte, tenía dificultades para programar una reunión con Biden, Xi la recibió y le anunció que deberían trabajar en oportunidades de proyectos en los campos de salud, economía digital, comercio, energía, minería, turismo y cultura.

Aunque logró acercamientos concretos en la reunión con Xi, Biden, anfitrión de la cumbre, parece tener un escenario más complicado de cara a las elecciones presidenciales de 2024, cuando buscará la reelección.

El presidente estadounidense mantendrá este viernes una reunión bilateral con López Obrador y pretende abordar el complejo tema de la crisis migratoria -tema clave de la campaña electoral- y la lucha contra el fentanilo, en medio de acusaciones de que el opioide se trafica desde México.

Al margen de la cumbre, Biden se reunió con los líderes de Japón y Corea del Sur, a quienes ya había recibido en agosto para una reunión histórica en Camp David.

China y Estados Unidos compiten por la influencia en una región altamente dinámica que se extiende desde las costas de Canadá hasta Chile, Australia, China y Rusia.

Si bien China ofrece un programa especial de infraestructura y préstamos, Estados Unidos busca fortalecer alianzas con otros tipos de acuerdos comerciales.