Riesgo de desnutrición y enfermedades para niños en campamentos de migrantes, dice UNICEF

por Lizbeth Díaz

MÉXICO (Reuters) – Miles de niños, niñas y adolescentes migrantes que viven en un campamento improvisado en el sur de México están en riesgo de desnutrición, enfermedades y podrían ser separados de sus familias, dijo el miércoles el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

Miles de migrantes, muchos de ellos niños, acampan cerca de un estadio de fútbol en la ciudad de Tapachula, cerca de la frontera con Guatemala, y esperan una respuesta a sus solicitudes de asilo o visa humanitaria. .

“La situación es muy preocupante, hay mucha gente (en este campo) y tenemos que lidiar con el coronavirus”, dijo en un video Pressia Arifin-Cabo, representante adjunta de Unicef ​​en México.

“También hay mucha basura, no hay puntos de acceso al agua donde los migrantes puedan lavarse o cubrir sus necesidades nutricionales”, agregó.

Pressia Arifin-Cabo también indicó que UNICEF estaba particularmente preocupada por posibles separaciones familiares, precisando que muchos de ellos habían perdido sus documentos durante sus viajes.

Tapachula se ha convertido en punto de encuentro de decenas de miles de migrantes en formación de caravanas para llegar al norte del país.

Las autoridades mexicanas intentaron desmantelar el campamento y comenzaron a trasladar a los migrantes de Tapachula a otras áreas, con la promesa de regularizar su situación.

La autoridad migratoria de México y la agencia gubernamental responsable de la asistencia a niños y adolescentes no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Según datos oficiales, alrededor del 40% de los 84.600 solicitantes de asilo en México son menores de edad.

Muchos de ellos esperan poder solicitar asilo en Estados Unidos, donde la semana pasada se reintrodujeron los Protocolos de Protección de Migrantes, que exigen que los solicitantes de asilo esperen en México las audiencias de inmigración en Estados Unidos.

(Informe de Lizbeth Diaz; escrito por Stefanie Eschenbacher; versión francesa Camille Raynaud)