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Algunos de los edificios más altos del mundo se encuentran en China
China ha prohibido la construcción de super rascacielos en ciudades más pequeñas como parte de una política para tratar de frenar los proyectos faraónicos.
El país es conocido por tener algunos de los edificios más altos del mundo, incluida la Torre de Shanghai, que tiene 128 pisos y 632 metros de altura.
La construcción de nuevos rascacielos, en cambio, ha sido cuestionada en ciudades de menor densidad, donde no hay necesidad de integración vertical. Los críticos locales han sugerido que los edificios fueron construidos por vanidad y autopromoción más que por necesidad práctica.
El anuncio para limitar la construcción de este tipo fue recibido positivamente por los usuarios del sitio Weibo, una de las redes sociales más grandes del país. Muchos comentarios decían que las arañas del cielo son solo un “cariño”.
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La Torre de Shanghai es el edificio más alto del país.
Urbanismo
El país ya contaba con un reglamento que prohíbe la construcción de edificios con más de 500 metros. Y a principios de año entró en vigor una nueva norma que prohíbe la “mala arquitectura”. No está claro cuáles son los criterios objetivos para que un edificio se considere feo.
China también ha luchado contra edificios que son copias de famosos edificios extranjeros.
“Estamos en un momento en que la gente está muy ansiosa por construir cosas que pasarán a la historia”, dijo Zhang Shangwu, director de arquitectura y planificación urbana de la Universidad de Tongji, al South China Morning Post.
“Quieren que cada edificio sea una postal, y los contratistas y los gobiernos terminan yendo a los extremos y construyendo proyectos extraños”, dijo el profesor.
¿Qué dicen las nuevas reglas?
En un anuncio el martes, el gobierno chino dijo que no se pueden construir rascacielos de más de 150 metros en ciudades con poblaciones de menos de tres millones de personas.
Las ciudades más grandes pueden tener edificios de hasta 250 metros.
El gobierno ha dejado claro que es posible solicitar permisos excepcionales para la construcción de más de 150 metros en ciudades más pequeñas. Sin embargo, en ningún caso las ciudades con menos de tres millones de habitantes podrán construir por encima de los 250 metros.
Asimismo, las ciudades más grandes podrán solicitar permisos para construir por encima de los 250 metros, pero en ningún caso podrán tener nuevas edificaciones de más de 500 metros.
Las ciudades que aprueben la construcción de edificios que violen las nuevas reglas “tendrán que rendir cuentas”, dijo el gobierno del país.
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