Cada vez más familias se ven obligadas a separarse en la frontera entre Estados Unidos y México, y los inmigrantes se quejan de la burocracia, alegando que es casi imposible cruzar legalmente.
Los migrantes de México pasan sus días esperando, sin trabajo y con lo poco que pueden encontrar en la calle para sobrevivir.
La aplicación móvil que entró en vigencia a principios de este año permite programar una reunión con un técnico para solicitar asilo y planificar un lugar para ingresar al país, pero es un proceso que los usuarios dicen que es complicado.
Muchas familias acaban separadas, e incluso hay casos de niños que cruzan la frontera solos, ya que en estas circunstancias no se les puede negar.
La promesa del presidente estadounidense de nuevas medidas trajo esperanzas que pronto se derrumbaron.
La semana pasada, Joe Biden anunció que el acceso al país podría volverse aún más difícil. La ley, aún por aprobar, prohíbe la entrada a quienes buscan asilo en la frontera con México después de haber cruzado varios países.
Una política propuesta por el presidente de los Estados Unidos para detener los cruces ilegales que ya es ser comparado por la crítica con los de su antecesor, Donald Trump.
El flujo migratorio va en aumento y de octubre a enero casi un millón de personas intentaron cruzar la frontera, un 30% más
que en el mismo período.
“Analista. Gamer. Explorador amistoso. Amante de la televisión incurable. Aficionado a Twitter. Erudito de las redes sociales. Geek aficionado a la web. Orgulloso gurú de los zombis”.