Los mexicanos deciden hoy (10) si su presidente debe permanecer en el cargo, en un referéndum sin precedentes. El jefe de Estado, Andrés Manuel López Obrador, cree que el referéndum es fundamental para confirmar su mandato democrático, pero la oposición lo considera una costosa distracción de los verdaderos problemas del país.
Obrador, en el cargo desde diciembre de 2018, es el autor del primer referéndum “revocatorio” del México moderno, y críticos y partidarios esperan una victoria fácil.
La votación alimentó la especulación de que el plebiscito podría abrir la puerta a ampliar los límites del mandato presidencial en un país donde el jefe de Estado sólo puede cumplir un mandato de seis años.
López Obrador niega que quiera extender su mandato, pero ha utilizado el referéndum para galvanizar a sus partidarios y criticar a sus opositores, muchos de ellos líderes que han alentado a los mexicanos a ignorar la votación como un ejercicio de propaganda para el presidente.
Las encuestas de opinión sugieren que la participación probablemente no alcanzará el umbral del 40% necesario para que el resultado de la votación sea vinculante, aunque López Obrador ha dicho que respetará el resultado de todos modos.
“La democracia debe convertirse en un hábito en México”, anunció el presidente a la multitud tras abandonar la cabina de votación, “para que nadie olvide que es el pueblo el que gobierna”.
El plebiscito también representa una prueba de la fuerza del presidente de cara a las elecciones para gobernador de junio.
Obrador no ha cumplido sus promesas de campaña, incluida la reducción del crimen y el impulso de la economía. También ha inquietado a los inversores al intentar renegociar contratos firmados por gobiernos anteriores y está reforzando el control estatal sobre los recursos naturales.
Pero su exitosa implementación de programas de bienestar social y su incansable retrato diario de una narrativa política –en la que interpreta a un defensor moralmente recto de los pobres contra una élite rica y corrupta– han ayudado a mantener su popularidad.
El referéndum, que costó millones de dólares y fue ampliamente publicitado en la capital, pregunta a los mexicanos si el mandato de López Obrador debe ser revocado “por pérdida de confianza” o si su mandato debe expirar el 30 de septiembre de 2024, como estaba previsto.
Una encuesta periodística El financiero mostró este mes que dos tercios de los mexicanos quieren que el presidente permanezca en el cargo. Un tercio quiere que abandone el gobierno.
López Obrador fue elegido abrumadoramente en 2018, con más de 30 millones de votos, el total más alto en la historia de México. Según los analistas, cuanto más se acerque la participación a esa cifra, mayor será el éxito del referéndum.
Las urnas están abiertas hasta las 6 p.m. hora local. Se espera que las autoridades electorales publiquen una estimación preliminar del resultado durante la noche.
*La reproducción de este contenido está prohibida.
“Analista. Gamer. Explorador amistoso. Amante de la televisión incurable. Aficionado a Twitter. Erudito de las redes sociales. Geek aficionado a la web. Orgulloso gurú de los zombis”.