Según datos del Boletín Semanal de Clima y Cultivos, publicado este martes (1) por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), el huracán John azotó la costa sur del Pacífico mexicano con fuertes vientos y lluvias torrenciales, provocando destrucción. en infraestructura costera. El huracán, que llegó como tormenta de categoría 3 con vientos de hasta 105 nudos, tocó tierra inicialmente en la frontera entre Oaxaca y Guerrero.

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Según el boletín, luego de causar inundaciones y deslizamientos de tierra, especialmente en regiones desde Michoacán hasta Oaxaca, el huracán se disipó brevemente, antes de reformarse y golpear nuevamente la costa. En algunas zonas, las precipitaciones superaron los 400 mm, provocando graves daños a las infraestructuras, en particular al sistema de transporte. Sin embargo, los impactos más devastadores se produjeron fuera de las principales zonas agrícolas del país, preservando gran parte de las plantaciones.

A pesar de las fuertes lluvias en la costa, más áreas agrícolas del interior, especialmente en las tierras altas del sur (de Jalisco a Puebla), sureste (incluida la Península de Yucatán) y plantaciones de caña de azúcar en Veracruz, se beneficiaron de más precipitaciones estacionales, que variaron entre 10 y 50 mm. lo que contribuyó al desarrollo del maíz y otros cultivos.

En el norte del país prevaleció un clima más seco, con lluvias ligeras e irregulares concentradas en las cercanías de Chihuahua y el norte de Tamaulipas. La sequía estuvo acompañada de altas temperaturas, que alcanzaron los 40°C en algunas regiones, lo que intensificó la evaporación en las cuencas fluviales del noroeste, según datos del Weekly Weather and Crop Bulletin.