Los gobiernos de Argentina, México, Colombia y Chile condenaron por separado el ataque de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro a la sede de los Tres Poderes en Brasilia el domingo (8).
Partidarios del expresidente que no aceptan el resultado electoral y piden una intervención militar ilegal invadieron el Supremo Tribunal Federal (STF), el edificio del Congreso Nacional y el Palacio del Planalto y vandalizaron el interior de los edificios.
“Rechazamos cualquier atentado contra la institucionalidad democrática que ha instaurado este hermano país”, dijo en su cuenta de Twitter el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
De igual forma, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, condenó los hechos en su cuenta de Twitter y llamó a una “reunión urgente de la OEA si quiere mantenerse viva como institución y aplicar la carta democrática”.
En tanto, el presidente chileno, Gabriel Boric, dijo en la misma red social que “el gobierno de Brasil cuenta con todo nuestro apoyo ante este cobarde y cobarde ataque a la democracia”.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, ha ofrecido su apoyo incondicional a Lula “ante el intento de golpe de Estado al que se enfrenta”.
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