Han pasado meses desde el choque entre Querétaro y la afición del Atlas en México, pero las consecuencias de lo sucedido siguen. Pese a ello, Esteban Hernández Martínez, a quien se creía muerto en las redes sociales, pide permiso para volver al estadio a ver la semifinal de la Liga MX ante Tigres.

Martínez, simpatizante de Atlas, se dejó ver en algunos videos compartidos sobre el sangriento e inconsciente enfrentamiento. Como los medios locales informaron que 15 personas habían perdido la vida en la lucha, pronto lo ubicaron entre las víctimas.

Poco después, la noticia ya mencionaba que Razor, como se le conoce entre la multitud, sí estaba vivo, aunque en estado grave. Quedó en coma debido a sus heridas, que dejaron secuelas.

“No recuerdo nada. Recuerdo que recién entramos al estadio, ni los gritos ni el dolor. Solo por las fotos que vi. Todo lo que pasó me da ganas de llorar. No trabajo. semanas de terapia. Necesito mejorar mi equilibrio y mi habla”, dijo al programa mexicano “Imagen Noticias”.

Incluso después de todo esto, hay algo que permanece intacto: su amor por Atlas. Mientras aún se recuperaba, Esteban comentó su deseo de volver a las canchas. “Mis colores no los renego, los llevo en el corazón, los sigo cargando aquí. No me arrepiento después de lo que pasó”, reveló.

Sin embargo, debido a toda la confusión, se encuentra entre los fanáticos que han sido prohibidos en las gradas. De esta forma, Martínez quisiera el apoyo de Atlas para poder repasar en directo a su club. “El club no me apoya, ni se acuerda de mí. Que me invite la directiva al estadio, sin el carnet de hincha ni la credencial que no puedo entrar”.