Al menos 13 policías o empleados de la Procuraduría General de la República fueron asesinados en una emboscada de una pandilla en el centro de México el jueves, informaron la Secretaría de Seguridad y la Procuraduría General de la República.
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El ataque se produjo en una zona del municipio de Coatepec Harinas, mientras el convoy realizaba operativos contra grupos armados que operan en la zona, señalaron las mismas fuentes.
“En este momento, sabemos que cinco policías y ocho empleados de la Fiscalía General fueron asesinados en este cobarde ataque”, dijo un comunicado conjunto a estas instituciones.
Después del ataque, miembros de la Guardia Nacional, el Ministerio de Defensa y la Marina lanzaron una persecución para localizar a los atacantes.
Las autoridades argumentaron que el ataque no quedaría impune.
El estado de México, fronterizo con la capital, es considerado uno de los más violentos del país. Allí operan varios cárteles del narcotráfico, entre ellos Familia Michoacana.
Más de 300.000 personas han muerto en México desde que el gobierno federal lanzó una operación militar antidrogas en diciembre de 2006.
El gobierno atribuye la mayoría de estos delitos a las pandillas.
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