Venezolanos en México piden vuelos humanitarios para regresar a casa. Muchos de ellos están en el país porque fueron expulsados de Estados Unidos.
Ana Villa Lobos salió de Venezuela hace meses con su único hijo. El destino de los Estados Unidos. Dice que en ese momento tenía hambre, frío, cruzó el río y el bosque a pie. Pero una vez que llegó a la frontera, tuvo que rendirse.
Desde el 13 de octubre, una nueva ley aprobada por el Congreso norteamericano ha dificultado el ingreso de venezolanos al país. La regla dice que EE. UU. solo recibirá 24.000 nuevos venezolanos y deben llegar en avión.
Los inmigrantes ilegales que intentan cruzar a pie la frontera mexicana son repatriados al país vecino. Ya que Estados Unidos no tiene relaciones diplomáticas con Venezuela. Pero la mayoría de ellos ni siquiera pueden sobrevivir en México.
Ana Villa Lobos desde el inicio de la relación se encuentra en un dormitorio cedido por la iglesia católica mientras intenta regresar a su casa. Otra venezolana, Hélia García, llegó a Estados Unidos pero fue deportada, ahora espera encontrar trabajo en México.
Según Naciones Unidas en los últimos años siete millones de venezolanos se han ido del país por la crisis económica y social, pero sin trabajo en otros países algunos terminan regresando. En 2018, el presidente venezolano Nicolás Maduro creó un programa para repatriar a cualquier persona que desee regresar al país, según el gobierno venezolano hasta el momento 30,000 han realizado el viaje de regreso.
Con información de Reuters
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